El fiscal penal y contravencional N° 2, Norberto Brotto, que investiga la agresión del taxista Claudio Rímolo a un automovilista, destacó que los hechos de violencia en el tránsito se reiteran. “Sucede mucho dentro de lo que es el delito de daño, hay muchos casos en la Justicia por este tipo de reacciones”, explicó el fiscal de la Justicia porteña.
En un turno de 15 días, no exagero si digo que tenemos 15 casos de conductores que bajan y se pelean, o le rompen el auto a la otra persona, o rompen el colectivo. La estadística puede ser uno por día o que en una noche me entren tres casos de estos”, comentó en declaraciones radiales.
El fiscal aclaró que si bien la cifra “no es tan específica de un caso por día” ni “tan lineal” (en la fiscalía no llevan estadísticas sobre delitos o contravenciones derivados de discusiones de tránsito), los casos “se repiten mucho”.
“Hay mucha pelea, y mucha reacción y justicia por mano propia”, expresó Brotto. Pero, respecto de la agresión de Rímolo a Fabio Rojas, ocurrida el viernes en Villa Urquiza, recordó que no es tan común el nivel de violencia registrado. “Esto siempre pasó, no es algo nuevo. Pero lo que llama la atención es la violencia de este hecho, eso es lo que marca la diferencia”, dijo.
Si bien el Código Procesal Penal de la ciudad tiene establecida la mediación como un peldaño previo al juicio, por la virulencia de la conducta del taxista Brotto descartó la posibilidad de pasar por esa instancia. “Observar a una persona con una violencia tan extrema en la calle y que ni siquiera se fija en la salud de su bebé y de su señora [a bordo del taxi cuando embistió marcha atrás al auto de Rojas] me lleva a descartar la posibilidad de la mediación“, afirmó.
Asimismo, consideró que hubo muchos agravantes. “Subirse, dar marcha atrás y seguir insistiendo con el daño, que adentro del taxi estuvieran la mujer y el bebé. La idea es ir por la pena máxima [dos años de prisión] y voy a pedir determinadas cautelares, como la prohibición de que siga conduciendo”, agregó. La licencia profesional de conducir ya le fue suspendida preventivamente por la Secretaría de Transporte y Tránsito porteña.
Domiciliaria para el taxista
La Justicia ordenó que el taxista violento que el sábado protagonizó una escena digna de la película Relatos Salvajes, Claudio Daniel Rímolo, aguarde bajo prisión domiciliaria el juicio oral y público en su contra.
A efectos de cumplir la medida cautelar impuesta, el fiscal Norberto Brotto ordenó que se le coloque una tobillera electrónica para verificar que cumpla con lo dispuesto por las autoridades.
Fuentes judiciales informaron que se adoptó esta decisión en virtud del estado de salud de la esposa del conductor, que necesita la presencia del hombre en el hogar. En ese sentido, Martín Castillo, el abogado del taxista, dijo que la mujer “tiene arritmia y problemas cardíacos”.
El abogado adelantó que apelarán el fallo del juez y explicó que su defendido no declaró porque “está en estado de conmoción” después del hecho de violencia que protagonizó. Además, reconoció que en la decisión del juez tuvo que ver que tenga antecedentes penales. “Sino nos hubiésemos ido los dos de acá sin problema”, indicó.