El Centro de Educación, Servicios y Asesoramiento al Consumidor (CESyAC) determinó que una familia de clase media, proveniente de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), debió percibir en mayo un ingreso de $99.558 para no ubicarse por debajo de la línea de pobreza.
El cálculo se hizo a través del análisis de “la canasta de clase media” que incluye diferentes aspectos de la economía doméstica como el alquiler de vivienda, los gastos de un auto de 10 años de antigüedad, el abono de medicina prepaga, la cuota de un colegio privado de dos niños y el abono familiar en un club.
Según el CESyAC, un 77% es destinado a los servicios básicos del hogar y un 23% para los productos de consumo masivo. Dentro de esta última categoría, los alimentos que más subieron de precio fueron las carnes (4.55%), los comestibles envasados (1.47%) y las frutas y verduras (1.44%). En cuanto a los servicios básicos, hubo un notorio aumento de 3.47% en el servicio de Alumbrado, Barrido y Limpieza (ABL) dispuesto por el gobierno de la Ciudad.
Se detectaron incrementos exponenciales en un mismo producto, como el kilo de zanahoria que ahora vale 73 pesos más que en junio del año pasado ($106,06). Además, los 500 gramos de polenta pasaron de $ 36,81 en junio de 2019 a $ 72,94 en mayo de 2020 y el pollo de $90,85 a $155,76.
El análisis hecho por la entidad de consumo marca una amplia diferencia con el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC), que señala necesario para una familia conformada por dos adultos y dos niños, haber tenido en abril un ingreso de $ 45.593,98 (Aun no está hecho el informe de mayo). Según el organismo público, la Canasta Básica Alimentaria (CBA) subió un 3.1% y la Canasta Básica Total (CBT) un 1.4%, mientras que la inflación general tuvo un registro de 1.5%. Las variaciones interanuales de ambas canastas resultaron del 51.1% (CBA) y 44.4% (CBT).