En la Ciudad, seis de cada diez personas en situación de calle padecen problemas de consumo o trastorno mental severo. Por eso, la gestión de Jorge Macri dividió la atención por más que siguen sumándose a diario personas en situación de calle que vemos al caminar la Ciudad.
En la Ciudad, seis de cada diez personas en situación de calle padecen problemas de consumo o trastorno mental severo. Eso desata niveles de violencia en la calle que pueden costar vidas, como ocurrió con el homicidio del oficial Juan Pablo Roldán o el ingeniero Mariano Barbieri, o el abuso sufrido por la trabajadora de la salud del Hospital Fernández.
Cuando el Gobierno o algún vecino detecta un caso, llama al 108 y un equipo del BAP evalúa la intervención del SAME psiquiátrico. Y, si es necesario, se traslada al paciente al hospital con guardia psiquiátrica más cercano. Allí se les realiza el diagnóstico y se hace la derivación posterior al dispositivo que cada persona necesite.
crédito: FOTOS GCBA.
Funciona las 24 horas, los 365 días del año y recibe solo a hombres (el 74 % del total de las personas en situación de calle lo son). “Hay 26 profesionales de distintas especialidades dedicados al abordaje integral de quien venga a estos sitios”, explicó Jorge Macri. El equipo profesional está compuesto por tres psiquiatras, dos psicólogos, un trabajador social, seis enfermeros especializados, 12 psicólogos sociales y dos acompañantes terapéuticos.
El Jefe de Gobierno, Jorge Macri, recorrió este sábado el Centro de Inclusión Social (CIS) Julieta Lanteri, en Constitución, que cuenta con 30 plazas disponibles: ”Es importante que vean la calidad del lugar. Este es un centro o parador dedicado especialmente a adultos mayores con problemas de salud mental o adicciones. Estamos empezando a segmentar la problemática porque se hacía muy compleja la convivencia entre familias y personas con este tipo de problemática”.
Jorge Macri agregó: “En este lugar se pueden duchar, dormir, comer, pero además resocializar, porque muchas veces lo que pasa con la gente en situación de calle es que están rotos sus vínculos. El 60 o 70% no tiene alguien que pida por ellos o que ellos te digan quién es un vínculo, entonces hay reconstruir eso para que puedan convivir en comunidad”.
“Tenemos otros 46 de estos centros y vamos a seguir fortaleciéndolos, pero también necesitaríamos que en la Provincia de Buenos Aires se trabaje este problema, porque muchos vienen a buscar acá, a la Ciudad, lo que no consiguen en su lugar de residencia”, puntualizó el Jefe de Gobierno.