Es una estructura de principios de siglo XX, reformada que la intentaron renovar pero fue cerrado y los vecinos reclaman que su cierre generó no sólo problemas de tráfico.
Se trata del puente que une Palermo con Colegiales y Belgrano. Fue clausurado en enero del año pasado para iniciar obras, pero los trabajos nunca comenzaron. Vecinos denuncian robos y complicaciones de tránsito
Se trata de una estructura que tiene más de un siglo y fue contraído por la Compañía de tranvías Lacroze en 1916 para que los vehículos atravesaran las vías del tren. Con sus 52 metros de longitud, es el puente de mayor luz libre de la Ciudad.
Según levantó el diario Tiempo Argentino en charlas charlas con vecinos, desde el gobierno de Jorge Macri se contactaron con Martín Polimeni, uno de los mayores especialistas en restauración de puentes ferroviarios.
“El puente de Ciudad de La Paz está cerrado porque está dañado. El daño que tiene no es producto del paso del tiempo ni de las fuerzas de la naturaleza en general. Más bien de algunos seres humanos con nombre y apellido que seguramente han gozado de impunidad después del daño que produjeron”, explica el vecino del barrio de Palermo. Alejandro es arquitecto y asegura que al permitir el tránsito vehicular sobre el puente, se le agregaron capas de asfalto y hormigón que incrementaron la carga permanente.
Desde que fue clausurado el paso vehicular los vecinos quedaron aislados y expresan que la inseguridad se volvió moneda corriente. La zona quedó abandonada y, sin presencia de efectivos policiales, los robos y las complicaciones en el tránsito se naturalizaron.
La obra antigua
Polimeni fue quien diseñó el futuro proyecto que mantiene la estructura original. Además, se hará una puesta en valor de la zona, otra de las cuestiones que generó mucho ruido en el barrio por los problemas de inseguridad.
La obra tendrá un costo aproximado de 2 millones de dólares y se licitará a fin de año. Quedará a cargo del Ministerio de Desarrollo que conduce Pablo Bereciartúa.