El jefe de Gabinete porteño, Felipe Miguel, y el ministro de Transporte de la Nación, Guillermo Dietrich, inauguraron la estación elevada Lisandro de la Torre del Viaducto Mitre, el cual comenzó a funcionar el 10 de mayo y permite que más de 650.000 vecinos ahorren hasta 24 minutos de viaje diarios.
La nueva estación, ubicada a 10,6 metros de altura, cuenta con un ascensor y una escalera mecánica por sentido, además de 3 escaleras pedestres y 1 de emergencia por andén. Tiene 220 metros de longitud y una moderna infraestructura que incluye un techo tipo “refugio” para que los vecinos estén resguardados y protegidos ante las lluvias, tormentas y granizo.
Para su construcción, la estación se desplazó 50 metros en sentido a Retiro desde su ubicación original para centrar el andén con las escaleras. En la planta baja están las boleterías, controles de acceso, ascensores y baños públicos. El entrepiso sirve como descanso y distribuidor de los flujos de circulación.
El Viaducto Mitre es una obra de ingeniería que elevó las vías del ferrocarril a lo largo de 3,9 kilómetros, evitando los peligrosos cruces a nivel y abriendo nuevas calles para mejorar la fluidez del tránsito.
Asimismo, la elevación de las vías permitió sumar 60.000 m2 de nuevos espacios públicos y verdes debajo del viaducto, el equivalente a seis manzanas.
Además de la estación Lisandro de la Torre, se construyó otra estación elevada, Belgrano C, que también cuenta con andenes de 220 metros de largo y es 100% accesible para personas con movilidad reducida, gracias a escaleras mecánicas y ascensores.
La nueva estación Lisandro de la Torre del #ViaductoMitre ya está lista. Recorrimos las instalaciones con @Guillodietrich, @francomoccia, @manlop, @OrfilaMarcelo, @juanjom y @carlosmfrugoni; donde miles de vecinos van a poder moverse más cómodos y seguros. pic.twitter.com/RDpOFuXycO— Felipe Miguel (@FelipeMiguelBA) 17 de septiembre de 2019
Gracias al viaducto también se eliminaron un total de ocho barreras (Olleros, La Pampa, Sucre, Juramento, Mendoza, Olazábal, Blanco Encalada y Monroe) y se abrieron cuatro calles que antes estaban cerradas por el corte de las vías: Roosevelt, Virrey del Pino, Echeverría y José Hernández.
El viaducto beneficia a un promedio de 100.000 usuarios diarios del Ferrocarril Mitre; a 30.000 vecinos que usan el colectivo y a otros 70.000 que usan sus autos, y a los 454.000 vecinos de los barrios de Belgrano, Núñez y Palermo .
Acto sin Larreta
El Jefe de Gabinete porteño señaló que “esta obra del Viaducto Mitre es un paso más en seguir construyendo una ciudad donde todos vivamos mejor” y destacó además que “con este viaducto eliminamos ocho barreras, se abrieron cuatro nuevos cruces, y eso es tiempo libre que ganamos todos para estar con nuestra familia, con nuestros amigos y hacer las cosas que más nos gustan. Y también ganamos en seguridad vial”.
“Vamos a seguir trabajando con el mismo compromiso, profesionalismo y entusiasmo con todas estas obras que transforman la vida y nos ayudan a que vivamos cada día mejor en todos los barrios de Buenos Aires”, aseguró.
En tanto, Dietrich explicó que “cuando hacemos una obra, en primer lugar, trabaja muchísima gente”, por lo que consideró “muy importante estar construyendo porque las obras generan posibilidad de desarrollo y posibilidad de trabajo”.
“Por otro lado, en cada una de estas obras hay mucha gente que trabaja. En este caso, les mejoramos las condiciones de trabajo a 20.000 personas que trabajan en los ferrocarriles todos los días cuando les damos seguridad, mejores instalaciones, mejores baños. No es menor porque muchos de ellos saben cómo durante tantos años no se hicieron cosas y las condiciones no eran las adecuadas”, continuó.
Y por último, remarcó “la importancia que tiene mejorar el transporte público” ya que “obras como esta hacen que el tren sea más seguro y esto significa cambiar las vías, que deje de tener barreras, el cambio que estamos haciendo para que tengan sistemas automáticos de frenos, la electrificación, las estaciones”.
También estuvieron presentes en la inauguración el ministro de Desarrollo Urbano y Transporte de la Ciudad, Franco Moccia; el secretario de Transporte porteño, Juan José Mendez; el secretario de Planificación de Transporte de la Nación, Germán Bussi; la secretaria de Obras de Transporte de la Nación, Manuela López Menéndez; el presidente de AUSA, Carlos Frugoni, y el presidente de Trenes Argentinos, Marcelo Orfila.
Moccia sostuvo que “lo más importante es lo que esto genera en la calidad de vida de los bonaerenses que vienen a la Ciudad y de los porteños”.
Y explicó: “Esto es más tiempo libre, es un tren que funciona más rápido, los accidentes en las barreras eran el principal problema de retardo en el servicio; también la calidad de las estaciones; con las ocho barreras que eliminamos, los colectivos no van a tener que esperar; son todos tiempos que los vecinos van a poder usar para lo que ellos quieran”.
Por último, Orfila dijo que “las encuestas decían en 2015 que los pasajeros se levantaban hasta una hora antes para asegurarse llegar a su trabajo en horario porque los trenes en ese momento no funcionaban tan bien”.
“Cuando la gente llega a una estación despreocupándose si el tren está o no porque sabe que está y llega a su trabajo, es cuando realmente le estamos cambiando la vida a la gente”, comparó.