Las marchas del “Sí se puede” tour y la campaña de Juntos por el Cambio por la reelección de Mauricio Macri cerró ayer en la plaza Vélez Sarsfield, en capital de Córdoba, provincia que le permitió vencer a Daniel Scioli en 2015. Fue la marcha número 32 en un mes, donde el Presidente reunió 1.500.000 de personas.
“Además de venir a gritar ‘Sí, se puede’, estamos acá para decir que no nos vamos a quedar callados, en silencio, viendo cómo nos roban el futuro. Ya demasiadas veces nos aguantamos el dedito, el atril y la prepotencia. Basta de esa forma de gobernar, no queremos más esa forma de gobernar. Somos una mayoría que pensamos así, que queremos convivir de una manera”, expresó Macri criticando a sus adversarios políticos.
Y continúo: “Pero tenemos que asumir que somos una enorme mayoría que durante muchos años estuvimos en silencio, con miedo. Y eso fue un error porque dejamos un espacio vacío y lo ocuparon aquellos que se creen dueños del Estado y de lo público. Y quisieron ir por todo. Por nuestra libertad, que es innegociable, quisieron ir por nuestra libertad”, manifestó Macri.
Y finalizó ante más de 100 mil personas presentes: “Esta noche no se me va a olvidar nunca en la vida. Llegar hasta acá nos costó más de lo que pensábamos. Como ustedes saben lleva tiempo resolver los problemas. No nos equivocamos cuando dijimos que el cambio era posible.
Y tampoco nos equivocamos que juntos somos capaces de encarar cualquier desafío. Demostramos que se puede gobernar sin generar odios o miedos, que se puede dialogar sentados alrededor de una mesa, buscando creativamente generar trabajo. Y también demostramos que se puede tener una política social sin clientelismo. Tratando de igual a igual a los adversarios y a los amigos. Se pueden construir obras en todo el país sin corrupción”.
Y culminó: “”Las otras seis vidas voy a volver a Córdoba siempre. Cada vida voy a estar acá con ustedes. Este es nuestro país. ¡Fuerza, Argentina! ¡Aguante, Córdoba! ¡Los amo con locura! ¡Vamos!”.
Pichetto tuvo uno de los discursos más duros: “Gente cercana a Cristina Fernández quiere dominar el poder judicial. No queremos la patria de Grabois. No queremos la violencia como ocurrió en Tucumán donde se han golpeado con palos”, disparó y agregó: “El candidato Alberto Fernández vino a apretar al gobernador Schiaretti y Córdoba no se arrodilla ante nadie”.
El tono gracioso de la jornada lo puso el peronista Luis Juez, ahora aliado de Cambiemos en Córdoba, quien ocupa el quinto lugar de la lista de diputados nacionales. El locuaz candidato arengó al público y llamó a acercar a la gente a las urnas: “Si hace falta hay que cargar a la suegra y el perro a votar. Para que gane el gato, hasta el perro tiene que votar”.